martes, 6 de abril de 2010

Cucuruchos de Windsor. Organización. El turco y la china. Born to be wi-iii-ild. Anafilaxia.

Quinto día: Me levanto y tras ducharme compruebo que no sé en que momento de mi vida aprendí a hacerme el nudo de la corbata. Los dos días los he hecho a la primera, o casi. Windsor, por supuesto. Nada de "cucuruchos de pescao frito", y mucho menos, más gordos que el cuello de quién lo lleva (http://www.mailxmail.com/curso-nudos-corbata-video/nudos-corbata-nudo-windsor , para los "pescaderos"). Me tomo mi tostada y salgo para la clínica papelito en mano. La verdad es que está muy bien indicado. No creo que me pierda. No me pierdo, que ya estaríais esperándolo. Pero no desesperéis.
Llego y no sé muy bien donde aparcar. Si sé dónde NO aparcar. Los únicos aparcamientos techados son los de los médicos de la clínica. Los demás que se mueran de calor.
Llego y me encuentro con el turco. Llegamos los primeros. Aquí es curioso porque van llegando por turnos y siempre por rango. Primero los celadores colocan a la mujer según las indicaciones dadas por la jefa de quirófano, que tiene en su poder las instrucciones del cirujano, las enfermeras después sacan la medicación necesaria para la operación de unos contadores individuales que registran quién y cuándo se saca cada vial, posteriormente el instrumentista monta la mesa a la vez que una circulante (hay 2) va "pintando" el campo quirúrgico. Todo bajo la atenta mirada de la jefa de quirófano. Llegados a este punto llega la "phellow", que prepara todo el campo quirúrgico. Cuando sólo hay que empezar, llega el cirujano, que se echa un líquido en un pis-pás (no se lava como aquí), le ponen la bata, los guantes y se pone a operar. ¡Eso es coordinación!
Dije que no lo haría pero tengo que decir que el robot es la leche. La colposacropexia lo imaginaba como algo imposible y con el "Leonardito" parece que lo podría hacer hasta yo. ¡Qué cosa más maravillosa! Parece uno de los "mechas" de Avatar (Avatarrrrr, Avatarrrr, Avatarrrrrrrrrrrr).
Hoy he hecho buenas migas con el turco y la malaya (la Chinita de ahora en adelante). Nos hemos puesto al día de que es lo que hacemos cada uno en su hospital y que no. La verdad es que el nuestro parece ser un hospital muy grande para lo que estoy escuchando. Y nadie tiene a 37 ginecólogos en nómina como nosotros. Entre una y otra operación la Chinita me ha ayudado a entregar los papeles del coche y el pasaporte. El turco nos ha acompañado también. Vaya tres mosqueteros. Ha sido una odisea porque nadie conocía a Saritah. Hoy ha sido cuando me he enterado de que trabaja a más de 60 kms de aquí.
Verna tampoco estaba, pero tampoco me ha dado pena. Más bien he sentido alivio.
He conocido a otra secretaria, la de la oficina de residentes (la Carmen de aquí), más joven, pero como las otras dos, "entradita en carnes", muy simpática pero cuyo nombre no consigo recordar. Me ha conseguido una taquilla en la quinta planta (o puñeta).
A la hora de comer lo he hecho con el turco y la Chinita. El turco entiende inglés mil veces mejor que yo pero parece que se ha metido una papa en la boca cuando habla (por no decir otra cosa).
La Chinita controla para ser una residente, no sé que edad tendrá, pero la tía sabe tela de cirugía robótica y me va explicando cosillas (aunque tengo que decir que ahí, por lo menos, no estoy tan perdido).
Me he vuelto a casa con el coche sin el techo solar, que es tan grande que cuando lo quitas parece totalmente un descapotable. Parecía totalmente de película americana ¡Qué pasada!
Bueno, para los que se desilusionaron al principio de esta entrada diré que a la vuelta si me perdí. Pero di la vuelta pronto.
Al llegar a casa me entraron ganas de correr (¡a mí!) y cuando salí a dar diez vueltas a la urbanización se quedó en una sola debido a lo que pensé que era una pésima forma física (que también) y resultó ser un inicio de ataque de alergia. Menos mal que tenía el Ventolín a mano y me duché rapidito porque me picaba todo el cuerpo. A lo rojo de la quemadura, se le ha unido la reacción alérgica. Parezco un tomate.
Correr es de cobardes y como dijo mi madre...


He estado leyendo mails desde entonces. Voy a estudiar que ya es hora.
Mañana intentaré comprar algo yo solito en la megatienda esa que abre 24 horas seguidas y a ver si puedo hablar con mi madre, que la tengo "olvidá".
Sigo sin saber si puedo usar los pelvitrainers... :S

7 comentarios:

BeaPuche dijo...

Ains, si Manu supiese que sigues sin ver un pelvitrainer...con la ilusión que le hace!!!jejeje. Me alegro que todo bien!

Anónimo dijo...

¿Por qué te dio el ataque de alergia?

Carolito dijo...

Quien se interesa de ese modo por mi estado de salud!?!?!?Pues supongo q por las flores q hay por la urbanizacion. A los seguidores q no m conocen personalmente o no lo saben, soy alergico al polen de no se que plantas. Escribo desde la clinica, por eso no pongo tildes!!!

Anónimo dijo...

Bah, era sólo curiosidad xD

Carolito dijo...

vaya, que desilusion...

Anónimo dijo...

No, hombre, ¡que sí me interesa! :)
Me ha encantado la referencia del último post a The Fellowship of the Ring xDD

Anónimo dijo...

(Me ha encantado la referencia porque cuando leí lo de "fellow" pensé lo mismo... y adoro ESDLA :))